El entrenamiento funcional es un conjunto de ejercicios que ayudan al cuerpo a fortalecerse y a ser más capaz de llevar a cabo las tareas diarias. Este método ha ganado popularidad en los últimos años debido a su máxima adaptación a la vida real. Los ejercicios funcionales trabajan de manera holística, involucrando varias partes del cuerpo y mejorando su interacción, a diferencia de los métodos de entrenamiento tradicionales que, por ejemplo, aíslan un solo grupo muscular.
Para aquellos que desean mantenerse fuertes y activos en su vida diaria, este tipo de entrenamiento es bastante crucial. La imitación de movimientos familiares, como levantar objetos, agacharse, alcanzar objetos a cierta altura y mantener el equilibrio, es la base del entrenamiento funcional. Los ejercicios que simulan levantar objetos del suelo o ponerse en cuclillas con un peso, por ejemplo, pueden compararse con trabajar en el campo o levantar grandes bolsas. Mejoran la estabilidad, el equilibrio y la coordinación, además de la fuerza muscular.
El uso del «core» del cuerpo, o los músculos que sostienen y estabilizan la columna vertebral, es uno de los pilares del entrenamiento funcional. Estos músculos se encuentran en los costados, la pelvis, la espalda y el abdomen. Además de prevenir lesiones, fortalecer estos músculos hace que las tareas cotidianas parezcan más activas. Por ejemplo, la plancha es un ejercicio funcional muy popular que enseña a mantener una postura adecuada y se centra en los músculos centrales.
Además, en el entrenamiento funcional se hace hincapié en el equilibrio. Los ejercicios que mejoran la coordinación y la flexibilidad de movimiento incluyen estocadas, sentadillas en superficies irregulares e incluso actividades con una pierna. Esto resulta increíblemente útil cuando se trabaja en situaciones incómodas o se mantiene el equilibrio en la vida diaria.
Cualquier nivel de aptitud física puede beneficiarse del entrenamiento funcional. Uno de sus beneficios es que tiene en cuenta tus necesidades y tu capacidad reales. Seleccionar este tipo de entrenamientos no solo mejora tu salud física, sino que también prepara tu cuerpo para los problemas que surgen en la vida diaria.